Cuando un calentador de agua comienza a fallar, muchas personas en Bogotá se sienten tentadas a resolver el problema por sí mismas para ahorrar dinero o evitar esperas. Sin embargo, los calentadores a gas o eléctricos son equipos delicados, con componentes que requieren conocimientos técnicos y protocolos de seguridad específicos.
Intentar reparar un calentador sin la capacitación adecuada puede generar más daño, afectar el funcionamiento del sistema, poner en riesgo tu integridad física e incluso provocar fugas de gas o incendios.
En este artículo, te contaremos cuáles son los errores más frecuentes al intentar reparar un calentador sin ayuda profesional y por qué es vital recurrir a expertos certificados.
1. Manipular conexiones de gas sin cerrarlas correctamente
Uno de los errores más graves y peligrosos es comenzar a abrir la carcasa del calentador o ajustar válvulas sin haber cerrado completamente la llave de paso de gas.
Esta acción puede liberar gas hacia el ambiente, generando un altísimo riesgo de explosión o intoxicación. Muchos usuarios no detectan una fuga pequeña y, al usar un encendedor o interruptor eléctrico, desencadenan un accidente.
Recomendación: Nunca intentes abrir ni ajustar partes del sistema de gas si no eres técnico certificado. El gas debe tratarse con extrema precaución y bajo normativas específicas.
2. Cambiar piezas sin diagnóstico adecuado
Otro error frecuente es comprar repuestos por intuición. Muchos usuarios suponen que el calentador no enciende por una bujía, batería o válvula, y compran piezas sin confirmar si realmente están fallando.
¿Qué puede pasar?
- Gastas dinero en repuestos que no solucionan el problema
- Puedes instalar una pieza inadecuada
- Al forzar componentes, puedes dañar otras partes del equipo
- Pierdes la garantía del fabricante
Solo un técnico puede realizar una prueba con multímetros, manómetros o software de diagnóstico según el modelo.
3. Ignorar los manuales y guías técnicas
Muchos calentadores traen un manual que detalla el procedimiento de instalación, uso y mantenimiento. Sin embargo, cuando el calentador presenta una falla, muchos usuarios improvisan sin leerlo.
En algunos casos:
- Se instalan válvulas en el sentido incorrecto
- Se obstruyen ductos de evacuación
- Se conectan terminales eléctricos mal
- Se daña la tarjeta electrónica por mal manejo
El desconocimiento puede hacer que un problema leve se convierta en una falla mayor o irreparable.
4. Usar herramientas no adecuadas o desgastadas
Una reparación profesional de calentadores requiere herramientas especializadas:
- Detectores de fuga de gas
- Llaves calibradas
- Equipos de presión
- Manómetros
- Kit para limpieza interna
Muchos usuarios intentan hacer ajustes con destornilladores o alicates comunes, lo que puede:
- Dañar tornillos de precisión
- Romper carcasas
- Desajustar válvulas de seguridad
- Deformar las conexiones hidráulicas
Un error común es usar cinta teflón de mala calidad en conexiones, lo que puede generar fugas ocultas.
5. No tener en cuenta la ventilación del espacio
La instalación y reparación de calentadores, sobre todo los que funcionan con gas, requiere asegurar una ventilación adecuada del lugar. Muchos usuarios desconocen esta norma y realizan ajustes en espacios cerrados como baños sin ventanas o zonas de lavandería sin ductos.
Esto representa un riesgo de acumulación de gases nocivos, como el monóxido de carbono, que puede causar:
- Mareo
- Dolor de cabeza
- Náuseas
- Desmayo
- En casos extremos, la muerte
La ventilación es obligatoria por ley en Bogotá.
6. Desconocer el tipo de calentador y sus características
No todos los calentadores funcionan igual. Existen:
- Calentadores a gas natural
- Calentadores a gas propano
- Calentadores eléctricos
- Calentadores de paso
- Calentadores acumuladores
- Calentadores digitales
Cada uno tiene una forma distinta de encendido, componentes internos únicos y presión de trabajo específica.
Muchos usuarios confunden los componentes y realizan ajustes como si todos fueran iguales, lo que termina por inutilizar el equipo o hacer que funcione ineficientemente.
7. Usar repuestos genéricos o de baja calidad
Con tal de ahorrar dinero, algunas personas compran repuestos no originales o de segunda mano para sus calentadores. Aunque en principio parezcan compatibles, estos repuestos:
- No tienen garantía
- No soportan altas temperaturas
- Se deterioran más rápido
- Pueden afectar otras piezas internas
Un repuesto de mala calidad puede dañar el intercambiador de calor, generar fugas o alterar el encendido.
Siempre se deben usar repuestos certificados y compatibles con la marca del calentador.
8. No verificar la presión de agua o gas
Algunos problemas de encendido o funcionamiento intermitente no se deben al calentador en sí, sino a condiciones externas como:
- Baja presión en la red de agua
- Regulador de gas defectuoso
- Filtros obstruidos
Muchos usuarios hacen cambios dentro del calentador sin verificar estas variables, generando más confusión. Un técnico realiza pruebas externas antes de intervenir el equipo.
9. Saltarse el mantenimiento periódico
A veces, el usuario espera que el calentador solo falle para llamar al técnico, y mientras tanto intenta ajustes básicos sin saber que el problema se debe a acumulación de sarro, suciedad o deterioro natural por falta de mantenimiento preventivo.
El mantenimiento incluye:
- Limpieza del intercambiador
- Verificación de presión
- Revisión de conexiones
- Limpieza del sensor
- Prueba de combustión
Evitar este servicio genera fallas a mediano y largo plazo.
10. No considerar las normas legales vigentes
En Bogotá, existen normas técnicas sobre la instalación y reparación de calentadores, especialmente los que usan gas. Hacer reparaciones sin licencia puede acarrear sanciones si hay una inspección o incidente.
Las entidades de control exigen:
- Certificación de instalación segura
- Pruebas de hermeticidad
- Instalación de ductos y ventilación según norma
- Documento de revisión técnica si hay incidentes
Realizar ajustes por cuenta propia te expone a consecuencias legales si ocurre un accidente.
¿Por qué es mejor contratar a un técnico especializado en Bogotá?
En lugar de improvisar con una reparación casera, lo mejor es confiar en técnicos certificados por entidades como:
- SENA
- ONAC
- Organismos acreditados en certificación de instalaciones a gas
Un técnico:
- Diagnostica con precisión
- Tiene repuestos originales
- Garantiza la reparación
- Cumple normas legales
- Previene riesgos de fugas o explosión
En Bogotá, puedes encontrar servicios con atención inmediata y garantía escrita.
Conclusión
La reparación de calentadores no es una tarea menor. Aunque parezca tentador intentar solucionarlo por cuenta propia, los errores cometidos por desconocimiento pueden salir mucho más caros y peligrosos que acudir a un profesional desde el inicio.
Ya sea por seguridad, eficiencia, legalidad o economía, lo mejor es dejar este tipo de trabajo en manos expertas, especialmente si estás en Bogotá y buscas asegurar el bienestar de tu hogar.
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